El desarrollo del programa científico de la inteligencia artificial (IA), sumado al paradigma tecno-económico de las plataformas sociales, ha demostrado ser uno de los fenómenos económicos culturales de mayor penetración a nivel planetario. En este escenario, el trabajo del sociólogo francés Antonio Casilli se plantea investigar los aspectos que conforman este fenómeno, mostrándonos que la retórica que envuelve la automatización y las profecías que auguran el «fin del trabajo» han mantenido relación directa con el auge de las plataformas sociales. Pero, ¿cuál es la relación entre la automatización impulsada por el artificio de la Inteligencia Artificial y el fenómeno de las plataformas sociales?
La obra parte demostrando que esta relación termina ocultando precisamente el trabajo humano bajo la retórica de su robotización. Para Casilli, los sueños de los robots inteligentes solo benefician a los grandes oligopolios digitales, representados por el acrónimo GAFAM (Google, Apple, Facebook, Amazon, Microsoft). Detrás del discurso promocional del reemplazo de trabajadores humanos por las tecnologías smart, lo que hacen las plataformas es más bien ocultar la realidad del mercado laboral: un trabajo no remunerado o mal remunerado, sin garantías ni protecciones laborales.
Las lógicas económicas y sociales que conforman las llamadas plataformas digitales solo pueden ser comprendidas si se develan los mecanismos de producción y circulación del valor que se producen en ellas. Serán estas formas de producción y circulación las que nos indican cuáles son las formas de dominación y de sujeción de una gran parte de la población que trabaja anónimamente en el digital labor.