Este estudio indaga en un momento particularmente significativo de la historia del movimiento obrero chileno: aquel en el cual, al hacerse predominante el sindicalismo legal, se transitó hacia una creciente institucionalización de la demanda obrera y se pugnó también por alcanzar una mayor incidencia sobre el Estado, a través de la experiencia del Frente Popular de 1938.
Para alcanzar este propósito, indagamos en los efectos económicos, sociales y políticos de la crisis del treinta; las principales acciones reivindicativas y demandas obreras, bajo la segunda administración de Arturo Alessandri (1932-1938).
Dos huelgas ferroviarias de alcance nacional, en enero de 1935 y febrero de 1936; diversos petitorios y manifestaciones públicas, así como los eventos e iniciativas encaminados a lograr la unidad del movimiento obrero, nos permitieron adentrarnos en procesos particularmente relevantes de esta etapa de la historia del movimiento obrero: la oposición a la gestión de gobierno de Alessandri, el rechazo y posterior aceptación de la legislación social y laboral, el compromiso con el Frente Popular, y la materialización, por último, del anhelo unitario de estos años, al constituirse la Confederación de Trabajadores de Chile (CTCH).