En Doscientas ballenas azules la escritora mexicana Margo Glantz nos acerca a la inminente desaparición de los cetáceos de piel suave y sedosa, y cómo estos mamíferos han sido retratados en la literatura universal y también en la mitología. Zeus, Ifigenia, Agamenón, Noé y Job, a la vez que Melville y Borges, han tejido o se han visto involucrados en historias vinculadas a estos monstruos marinos. Es así un libro no sólo acerca de la extinción de las especies, sino que también sobre la creación y la literatura.
En Cuatro caballos, la autora retrata, también de forma magistral, a estos animales “que están por todas partes”, siempre de pie, altivos, orgullosos, con un sedoso pelaje y de hermosas crines, además de la posibilidad que tenemos de transitar por la historia universal a partir de cada uno de los caballos que han acompañado todo tipo de batallas.
Dos libros cargados de imágenes poéticas que se articulan en torno a la violencia hacia los animales y cómo es la relación de estos y la humanidad.
“En este libro, Margo Glantz pone a prueba las posibilidades de la escritura, que se arroja a la caza de sí misma emulando el viaje del Pequod en Moby Dick. Aquello que en su primer libro se percibe como un coqueteo entre el signo y el espacio en blanco, en Doscientas ballenas adquiere el sentido sagrado de la escritura: fuego negro sobre fuego blanco, o bien, ballenas que “llevan por fuera el negro y el vientre lo tienen blanco”. Y es que en este libro la creación se aborda en el sentido pleno de la palabra y, así, se trata no sólo del texto que resulta del proceso creativo, sino de las palabras (verbos, pero también pronombres, adjetivos y sustantivos, como ballena) que crearon al mundo, que han ido transformando a la humanidad”.