Los pilares de roca y viento se enfrentan a la primera luna creciente.
En el transcurso de la pelea, que se torna cada vez más intensa, tanto Himejima como Shinazugawa manifiestan las marcas. Sin embargo, ni esto, ni su ataque combinado, parece ser suficiene contra la fuerza aplastante de su temible rival.
Afortunadamente. Genya se recupera asimilando una parte del demonio, pero... ¿cuál será el resultado final de esta encarnizada batalla?