Un álbum ilustrado donde la fantasía encubre la nostalgia y aborda, con imaginación y ternura, un tema difícil: la ausencia del padre. Una niña pequeña pide a un león que la acompañe en su vida diaria, de la escuela a su casa, y al hacerlo compartirá con ella pobreza, tareas domésticas y la ausencia del padre. El león imaginario, símbolo de fuerza y protección dará a la pequeña esa compañía paterna. El sorprendente final da una vuelta de tuerca a la historia y la hace más rica, emotiva y compleja. El rico tejido de las imágenes nos muestra el entorno social donde se desenvuelve la niña y alude a la realidad colombiana, mientras que el texto, sencillo y tierno, nos habla del mundo interno de la protagonista.